Zoey Redbird parece haberse convertido en la perfecta pringada. En una semana ha pasado de tener tres novios a cero, y de estar rodeada de un montón de amigos elegidos que confiaban en ella y la apoyaban a ser una marginada. Y hablando de amigas; de las dos que no la abandonan, una es una no muerta, y la otra no está marcada. Y Neferet le ha declarado la guerra a los humanos, cosa que Zoey sabe en lo más hondo de su corazón que está mal. Pero ¿acaso alguien va a hacerle caso? Al final del curso las aventuras de Zoey en la escuela de vampiros toman un rumbo salvaje y peligroso al poner a prueba las lealtades, sacar a la luz las verdaderas intenciones y despertar un antiguo mal en la fascinante cuarta novela de 'La Casa de la Noche'.
Cuarto libro de la saga La casa de la noche. En este libro seguimos con la historia de Zoey Redbird y sus amigos.

Este libro es el que menos me ha gustado de la saga, ya que la historia tarda en coger ritmo, más de la mitad del libro, cuando acabas la lectura de este, lo ves como de relleno. Esto es así porque descubres que lo verdaderamente importante ocurre al final en las ultimas 60 páginas, más o menos, y que el resto podía haberse omitido.

En esas hojas de relleno nos cuenta como se encuentra Zoey después de ser utilizada por Loren y Neferet para dejarla aislada y así poder manejarla a su gusto, ya que Neferet empieza a ver en ella una posible enemiga con los planes que tiene. Además nos cuenta como aparece un nuevo chico en la escuela y cómo los amigos de Zoey, que la dieron la espalda, empiezan a entender porqué no les contaba y ocultaba ciertas cosas y “los traicionaba” al unirse con la persona más odiada por todos, Aphrodite. Otra parte que queda un poco colgando es que la abuela de Zoey aparece bastante en esta parte del libro pero que deja en el aire el porqué de su aparición y relevancia, las ayuda revelándolas viejas profecías de la cultura Cheyenne, pero no desvela gran cosa para las hojas que la dedican a ella. En el libro sigue apareciendo el conflicto amoroso que Zoey tiene con varios chicos, Heat, su ex-novio humano, Erick, su ex-novio marcado ahora vampiro y profesor de teatro y Starck, el nuevo chico de La casa de la noche.

Es un libro transitorio dentro de la saga a mi parecer. El final es un poco demasiado fantasioso y precipitado. Algunos personajes que podían haber dado más juego apenas se aparecen en el libro.

Con esto no hay que menospreciar el libro sino que comparado con el resto de la saga es el más flojo y menos relevante ya que no revela nada nuevo, Zoey sigue con su lucha en el amor y con Neferet, sus amigos regresan a ella y empiezan a descubrir el verdadero poder que se esconde en la casa de la noche.

Lo más relevante en el libro es el personaje de Aphrodite que le toman con más importancia y es el que da los toques de humor.

Por esto al libro le doy un 7 sobre 10.

¡Gracias por la crítica! Te la acabo de enlazar.