3’5 Estrellas. Ha sido un divertido libro de Jo Beverley, quizás no de los mejores, pero lo he disfrutado mucho por ser de los Malloren, al menos algo apegado a ellos, porque tenía mis reticencias a seguir leyendo a los Malloren cuando los cinco primeros libros, los de los hermanos, ya los había leído, y los demás serían de familiares, amigos y apegados. La verdad es que no me arrepiento de haberlo leído, me ha gustado.

“Fuego de invierno” empieza poco después del libro de Rothgar y Diana. Es Navidad, y en la abadía de la familia Malloren se va a celebrar una fiesta por todo lo alto.

El quid de este libro es el enfrentamiento entre la familia Malloren y sus parientes, los Trayce. Ambas familias llevan en disputa desde los hechos acaecidos hace más de treinta años. Quienes llevamos leyendo esta serie desde el inicio sabemos del accidente ocurrido cuando Bey era un niño; su madre, lady Augusta se volvió loca, mató a su hija pequeña siendo un bebé y posteriormente se mató ella. Esto aterró de tal modo a Rothgar, que durante muchos años pensaba que la locura de su madre estaba en su sangre, y no quería casarse para que no les pasara lo mismo a sus hijos, por eso quería que sus hermanos menores, fruto del segundo matrimonio de su padre, serían mejores para heredar el título.

Este libro trata sobre la otra rama de la familia, los Trayce, y el protagonista es Charles Trayce, el marques de Ashart, o “Ash”. Nuestra protagonista es Genova Smith, la hija de un capitán de barco, emparentada con la nobleza, pero venida a menos, que actualmente trabaja para dos señoras mayores que son hermanas, lady Calliope y lady Thalia, a su vez tías abuelas del marqués de Ashart, y del marqués de Rothgar.

Las dos tías Trayce han sido invitadas a la fiesta de Navidad en la abadía de los Malloren, y estas lo ven como un inicio para acabar con la disputa de ambas familias, así que aceptan encantadas acudir a la fiesta, junto con su joven dama de compañía. En el viaje se encuentran con una serie de incidentes que desarrollarán la trama, además de encontrarse con su sobrino, Ash, que no tenía pensado acudir a la fiesta, pero ¿Cómo no va a hacerlo cuando se siente atraído por la dama de compañía de sus tías?

La novela ha sido un tira y afloja entre los protagonistas, aunque no puedo decir que el suyo haya sido un romance de gran renombre, correcto aunque lleno de malentendidos, pues al principio se atraen pero no se soportan por distintas circunstancias, pero cuando estalla todo no pueden estar juntos por las diferencias de clase y económicas de ambos. La familia Ashart es poderosa, pero hace tiempo que las arcas han disminuido y no tienen el favor de la corte, cosa que los Malloren sí, y Ashart lo que necesita es una heredera.

De modo que en éste libro habrá un poco de todo, pero si de algo puedo hablar muy favorablemente es de los personajes; la protagonista, Genova, me ha gustado mucho, no se ha dejado amedrentar, no es una señoritinga y sabía cómo y de qué manera responder a Ash, sobre todo se ha lucido con las escenas del final. De las tías de Ash y Rothgar señalaré a lady Thalia, ésa señora me ha encantado ¡Qué chispa por la vida tiene! Y sobre todo, mencionar a los Malloren, que han estado a la altura y me ha encantado saber de ellos: Rothgar y Diana, Bryght y Portia, y una muy feliz y embarazada Elf.

El libro ha merecido la pena por ver de nuevo a todos reunidos, me parece un libro muy acertado para leer en Navidad, y saber de una de las más entrañables familias de la novela romántica. Sin ser muy sobresaliente, me ha gustado mucho y lo recomiendo si te gustan los libros de Jo Beverley y especialmente los de la familia Malloren.

4’5 Estrellas, pero le dejo las 5 porque creo que es el libro de Jo Beverley que más me ha gustado. La verdad que me ha sorprendido en más de un sentido, y no es por el romance, creo que éste ha sido siempre la gran falla de ésta mujer, pero la historia de trasfondo me ha parecido tan interesante e intrigante que me ha tenido pegada a sus páginas hasta que lo he acabado.

“Un amor inadecuado” empieza justo en el final de “Fuego de invierno”. Estos son los libros séptimo y sexto de los Malloren respectivamente, aunque ya sabemos que los cinco hermanos Malloren ya han tenido sus felices historias de amor concluidas, pero en éste caso y por alargar serie tenemos a amigos y parientes de estos hermanos, y mucho de los Malloren actuando como secundarios.

Por el libro anterior, sabemos que la joven Damaris Myddleton pretendía casarse con el marqués de Ashart. Damaris es una dama plebeya que acaba de heredar una gran fortuna, a causa de ello sabe que es presa de cazadotes y desde que se convirtió en una heredera ha querido forjar su propio rumbo sin interferencias. Para pulir su nombre sólo le falta el título y por eso sabe que debe casarse con un miembro de la nobleza. Su tutor es Henry Malloren, tío del marqués de Rothgar, y por eso ambos son invitados a la fiesta de Navidad que celebran los marqueses en Rothgar Abbey.

A la fiesta de Navidad también estuvo invitado el marqués de Ashart, primo de lord Rothgar por parte de madre (la parte de su madre con la que estaba enemistado), y la joven dama de compañía de la anciana tía Thalia, Genova. Ambos, Ashart y Genova se enamoraron en “Fuego de invierno”, y la joven Damaris quedó desolada al ver frustradas sus aspiraciones, al igual que su reputación, dañada debido a su comportamiento durante la fiesta. Por eso lo que Damaris necesita es un héroe, un caballero, y ése será Octavius Fitzroger.

A Octavius Fitzroger lo conocimos en el libro anterior, como el amigo y compañero de lord Ashart. Fitz es un caballero totalmente inadecuado para lo que busca y necesita Damaris. A pesar de que es un caballero por nacimiento y educación, su reputación se vio seriamente dañada y no es recibido en los círculos de la buena sociedad, el no poseer ni un penique también lo hace inadecuado, así que no le quedó más remedio que alistarse en el ejército, donde sí que recibió una serie de condecoraciones importantes debido a su heroísmo.

Lo que Fitz desea es rehacer su vida en otra parte, quiere irse a América y llevarse a sus hermanas para salvarlas del bruto de su hermano, pero hasta que no resuelva unos asuntos en Inglaterra y consiga una pequeña suma de dinero no podrá hacerlo. Actualmente se dedica a hacer unos trabajillos para ricos y poderosos (casi como un espía) para conseguir su objetivo, pero lo que sí que no esperaba, era encontrarse con Damaris Myddleton.

En el inicio de la novela veremos que Fitz desea a Damaris desde el principio, también sabe que ella no es para él, porque él no tiene nada, y ella, con su belleza, carácter y dote, debe aspirar a algo más alto. Lo que sí que no puede resistir Fitz es que ella se vea seriamente dañada por perder a Ashart y ayudará a Damaris a fingir que no ha pasado nada y que sus afectos han ido por otros derroteros.

Es cierto que al acabar la fiesta de Navidad y con el reciente compromiso de Ash y Genova, los invitados no tienen mucho que hacer en Rothgar Abbey. El marqués de Rothgar se entera de un serio complot que envuelve a su primo, el marqués de Ashart, y recurrirá a los servicios de Fitz, para que mantenga a salvo a Ashart, lo custodie hasta su casa, donde espera encontrar unos papeles que guarda celosamente lady Ashart, la abuela de ambos marqueses, referente a su linaje, y que podrían ser las respuestas sobre quién desea ver muerto a Ash.

Damaris, que ahora ha acabado siendo la pupila de Rothgar, debe obedecer a este y viajar junto con Ash, Genova, lady Thalia y Fitz, hasta la propiedad de Ash, y posteriormente reunirse con él en Londres, donde Damaris será presentada en la corte y podrá entrar en el mercado matrimonial. Por supuesto a Damaris no le apetece nada este viaje, y menos viajar con Genova, a quien consideró su rival. Pero poco a poco ambas mujeres irán haciéndose amigas, sobre todo cuando Damaris se de cuenta de que no tenía futuro con Ash, y porque ella misma está empezando a sentir algo por Fitz.

Como he dicho al principio, el romance no ha sido lo mejor de la novela, aunque para lo que suelen ser los tipos de romance que desarrollaba Jo Beverley, sí puedo decir que es de los más bonitos y correctos. Lo mejor que ha tenido esta novela ha sido la historia de trasfondo, que en realidad resultan ser dos. Por un lado, la investigación sobre la ascendencia de Ash y Rothgar, y por el otro, la herencia de la propia Damaris. Durante la novela se suceden una serie de actos que pondrán en peligro a los protagonistas, tanto a Ash como a Damaris, y la historia está tan bien hilvanada, que no me ha quedado más que felicitar el magnífico trabajo que desarrolló Jo Beverley con éste libro.

Mi aplauso más sincero va para unos capítulos de hacia la mitad de la novela, donde vemos a los protagonistas investigando una serie de documentos sobre el linaje de Ash, con una perfección tan de investigador, que me ha maravillado, y yo como archivera valoro y mucho la labor de Jo Beverley como investigadora y el haberlo plasmado tan bien en sus personajes.

Poco más puedo decir de éste novela, salvo que me ha parecido una joyita, si no el mejor libro suyo que he leído. Admito que no me hacía mucha gracia continuar con la serie, porque la veía acabada con los cinco hermanos Malloren y no me parecía interesante leer sobre familiares y amigos, pero me alegro de haber ido más allá y haber conocido esta historia. Si la serie siguió siendo igual de buena, no tardaré en continuarla.

4 Estrellitas. Me están encantando los últimos libros que he leído de los Malloren y éste no es una excepción. La serie de los Pícaros tiene un poco de todo, y los Malloren empezaron muy reguleros, pero por suerte desde el cuarto libro no han hecho más que mejorar.

Era excéptica con eso de continuar ésta serie porque para mí los Malloren eran solo los cinco hermanos y los demás son apegados, y me planté hace tiempo con Rothgar, hasta que decidí darle una oportunidad a los siguientes y no me arrepiento.

Dentro de las extravagancias que puede presentarnos Jo Beverley en sus novelas, ésta puede que se lleve la palma, pero estamos ante una novela divertidísima que me ha tenido en vilo durante varios días.

"Secretos de una dama" nos abre una miniserie, dentro de la gran serie, los Malloren. Es una serie de tres nobles amigos, que ocuparán los libros 8°, 9° y 10°, que aparentemente no tienen nada que ver con los Malloren, pero se irá descubriendo la relación a medida que se van leyendo.

La historia empieza cuando Robin, conde de Huntersdown está recorriendo el norte de Francia para volver a Inglaterra. Robin tenía una misión en Versalles en la que tenía que encandilar a una noble con una perrita papillon (que ha sido un personaje más durante el libro). Y en una aislada posada, se encuentra a una monja maldiciendo en italiano. ¿Qué hace una monja en el norte de Francia?

Petra está desesperada, ha pasado sus últimos años escondida en un convento de Milán sin ordenar sus votos. Hace pocos años cometió una imprudencia y un conde de Milán la persigue para hacerla su amante. Pero hay un problema con Petra, es una hija bastarda de un noble inglés un affaire que tuvo su noble madre italiana; pero a su muerte, Petra es repudiada y su hermano no tendrá ningún escrúpulo en entregársela a su amigo el conde Ludovico. Por eso, Petra hace rápido un atillo y vestida de monja se ofrece a acompañar a una dama británica hasta llegar a las islas. Su madre le prometió a Petra que si estaba en apuros, su padre inglés la ayudaría, así que llegar a Inglaterra y conocer a su padre será su salvación para huir de Ludovico.

Petra está harta de la dama británica y sus odiosos hijos, y en cuanto conoce a ése guapo desconocido en una posada en el norte de Francia, no duda en ningún momento en aceptar la ayuda que éste le ofrece y se sube a su carruaje para que la lleve a Inglaterra. Además hay un plus, Petra necesita llegar cuando antes a Inglaterra, se ha dado cuenta de que los secuaces de Ludovico la han descubierto y planean secuestrala para llevarla de nuevo a Milán.

Así que el viaje de Petra y Robin se convierte en seguida en una carrera contrarreloj para escapar de Ludovico. En dicho viaje ambos protagonistas se irán conociendo y destruyendo las barreras que se erigen entre ellos, Robin no solo es un noble disoluto, si no un caballero honorable que hará lo posible porque Petra llegue sana y salva a Inglaterra, mientras que Petra no es una simple monja, si no una mujer pasional que añora las caricias de ése guapo desconocido. En el viaje deberán sortear una serie de peligros, así como la constante amenaza de secuestro que pende sobre Petra.

Una vez en Inglaterra, sus caminos se verán separados, con la principal barrera entre ellos, que ninguno fue completamente sincero con el otro. Robin estaba en una misión, y no podía confiarle a cualquiera quién es. Petra sí es sincera con Robin, pero en ningún momento le dice quién es su padre, no puede arriesgarse a ello, porque no sabe si será aceptada ni mucho menos reconocida.

Aún así será una auténtica y grata sorpresa cuando Petra llegue a casa de su padre, y se le abra una nueva vida en la que quizás sí sea posible descubrir quién es su Robin, y vivir feliz por siempre.

No es la novela más imprescindible de la serie, pero es cierto que me ha encantado y me he dicertido muchísimo con ella, sus personajes son increíbles y las aventuras que les pasan son adictivas. Como punto negativo, quizás que se hace un poco largo el libro y podían sobrarle un par de capítulos, pero Jo Beverley se lo ha currado muy bien investigando para ésta novela.

Me ha encantado ver de nuevo a los Malloren y al marqués de Ashart. Viendo lo bien que han estado los últimos libros de ésta serie no tardaré en leer los siguientes.

3 Estrellitas. No ha sido el mejor de la serie, pero ha estado entretenido.

"La boda secreta" es el noveno libro de la serie Malloren, aunque el segundo en ésta trilogía de tres amigos que integra la serie y está estrechamente relacionada con los Malloren.

En "Secretos de una dama" conocimos brevemente a Lord Grandiston, pero lo que nos trae su propio libro es una sorpresa mayor de lo que esperábamos.

Ya el prólogo nos pone en situación. Diez años antes Christian Hill era un joven soldado de dieciséis años a punto de partir para la guerra de Canadá contra los franceses, pero se ha enterado de que un compañero de su regimiento ha "raptado" a una dama y acude a la posada donde se alojan para salvar a la chica, a punto de ser violada. Christian reta al otro soldado y le da muerte. Lo que no esperaba es que apareciese en la puerta de la habitación la tía mandona de la chica, el dueño de la posada y demás parroquianos. Para salvar el honor de la chica, Dorcas Frogatt, Christian se ve en la obligación de casarse con ella, aunque da un nombre falso, y después parte con su regimiento a Canadá.

Han pasado diez años, y cada uno, mediante las artimañas de la abominable tía Abigail, creen que el otro cónyuge ha muerto. Así que Christian, ahora Lord Grandiston, se ve libre de cortejar a una dama rica, para que pueda alimentar a la gran prole de sus padres, pues son trece hermanos.

Por otra parte, Dorcas Frogatt, ahora Caro Hill, pues usa su segundo nombre y su apellido de casada, es una dama rica. Su padre tenía un próspero negocio de cuchillería en Sheffield que ha prosperado mucho, y ahora Caro se ve con el deseo de volver a casarse con un vecino.

El destino de ambos cambiará cuando llega una carta a Christian buscando a su persona y su condición legal. Algo le hace creer que su esposa sigue viva y viaja a Yorkshire para averiguar si su matrimonio realmente fue legal.

Cuando Christian se presenta en casa de Dorcas, no se reconocen, ambos han cambiado mucho, él es un hombre grande y atractivo, y ella se ha convertido en mujer, desde que fue una chiquilla escuálida de catorce años. Dorcas quiere creer que su esposo está muerto, así que éste desconocido se convierte en una amenaza para ella, pues su futuro, su negocio y su dinero no estará a salvo si su esposo está vivo.

Así que empieza una serie de disparates y engaños, con un road trip en pleno siglo XVIII en el que Dorcas intentará averiguar lo que pretende Christian, y éste decidido a encontrar a su esposa y hablar con ella para discutir sobre la legalidad de su enlace. Pero así y con sus identidades escondidas, se irán conociendo y enamorando, aunque ninguno sabe quién es el otro, y pensando que están engañando a su cónyuge.

Esto es lo que nos encontramos en "La boda secreta", el libro me ha gustado, pero algunas partes se me han hecho algo lentas y pesadas. Por supuesto, el libro mejora en la segunda parte, cuando vas descubriendo que la vida de los protagonistas está en peligro por una afrenta del pasado, y veremos de nuevo al marqués de Rothgar en escena para ayudar a los protagonistas.

El romance ha estado bien, pero le ha faltado algo más de chispa. Ambos protagonistas esperaban casarse con otras personas, pero acaban enamorados contra su voluntad, y desde luego lo que Dorcas quiere es romance, un hombre que se enamora de ella y le sea fiel ¿Cómo puede fiarse de Christian cuando en su road trip sedujo a otra mujer (a ella en secreto)?

En definitiva, un libro correcto sin ser muy sobresaliente, pero me ha dejado con muchísimas ganas de leer el libro del duque, la historia de Ithorne me ha dejado con muchas ganas.

4 Estrellitas. No sabía muy bien qué nota ponerle, el punto flaco de éste libro ha sido el romance Jo Beverley sabía contar historias, pero sus puntos débiles siempre fueron el romance y éste podría haber sido un mejor libro de haber tenido mejor historia de amor.

"El misterioso duque" es el décimo libro de la serie Malloren, pero el último de una pequeña trilogía incluida en la serie sobre tres amigos, Robin, Christian y Thorn. Éste es el libro de Thorn, el solitario duque de Ithorne, que se verá envuelto en una serie de aventuras, a cual más disparatada, por parte de su protagonista femenina, Bella Barstowe.

A pesar de ser Thorn un duque, tiene algo que ocultar, y es una doble vida e identidad que ha mantenido junto con su medio hermano bastardo, Caleb. Éste es capitán de barco, pirata y contrabandista y cuando Thorn se aburre de la tediosa vida que la nobleza obliga, adquiere la identidad de su hermano, el capitán Rose. Así es como Thorn conocerá a Bella.

Al inicio del libro, Bella Barstowe es secuestrada y ha sido llevada a Dover para embarcarse rumbo a Francia y pedir un rescate a su familia, pero el capitán Rose interfiere en el plan, y salva a Bella, para luego robarle ésta su caballo a Thorn y huir a su hogar.

Han pasado cuatro años desde el incidente y la vida de Bella ha cambiado mucho. Era la hija de un terrateniente del lugar, pero su familia es estricta y severa y nunca recibieron una nota de rescate, por ello Bella es castigada y recluida en la finca familiar, sin posibilidad de redimirse y viviendo de la caridad de los suyos.

Pero su vida cambiará cuando un abogado la visite y le hace saber que ha sido beneficiaria de una pequeña herencia por parte de su bisabuela y Bella parte con su abogado rumbo a Londres y con un propósito claro: renegar de los hombres, después del trato que le dieron en su vida, y unirse a las filas de Lady Fowler, una dama feminista, algo adelantada a su época.

Una vez en Londres, Bella no está del todo satisfecha con lo que predica lady Fowler. Pero además, se encuentra con uno de sus antaño secuestradores y éste le desvela quién estuvo realmente tras su secuestro. Así que Bella decide pedir ayuda a la persona que la rescató años atrás, el capitán Rose, y bajo una falsa identidad, volverá a Dover dispuesta a disculparse y rogar su ayuda de nuevo.

Thorn no ha olvidado a la joven a la que salvó años antes. Así que, cuando se hermano le hace saber que Bella le está buscando, Thorn parte a su encuentro y descubre a la hermosa mujer en que se ha convertido, y el propósito de su búsqueda: Bella desea venganza contra la persona que estuvo tras su secuestro, y Thorn la ayudará bajo la identidad del capitán Rose.

Es uno de los libros más largos y densos que he leído de Jo Beverley, pero una novela muy entretenida y con muchas aventuras. Pese a que es largo, no he sentido aburrimiento en ningún momento, pues siempre está pasando algo. Desde la aventura de los protagonistas, que tardan bastante en encontrarse de nuevo y hasta que comienza su romance, y más historia al final, cuando parecía que Jo Beverley no podía seguir con la misma; pero se guardaba bajo la manga otra historia de las mujeres revolucionarias de lady Fowler, que estará muy presente en ésta trilogía dentro de los Malloren.

Como digo, el romance es lo que me ha fallado. Sí, ambos protagonistas me han gustado, pero fueron algo sosos, a su historia le faltó más pasión o conflicto. Aunque si el libro ha estado bien es por la historia de trasfondo y los personajes secundarios, como Robin y Christian y el mismo marqués de Rothgar, siempre presente en ésta serie.

De momento haré un parón de los libros de Jo Beverley y quizás siga en un futuro no muy lejano con su serie de los Pícaros.