El protector – Heather Grothaus

Con este segundo libro de la trilogía volvemos a adentrarnos en el mundo de los “fenómenos paranormales”. Si recordamos el primer libro, la protagonista era bruja y venía de una familia de brujas que volverá a tener importancia en este libro.


Pero en este caso, Simone vive con la presencia continua del fantasma de su hermano que murió al año anterior por un incendio y ella se siente culpable por dejar que el niño se le escapara. Esto condiciona su vida puesto que le hace romper su compromiso con su prometido de toda la vida. Es por esto que tienen que viajar a Londres para buscarle un marido rico a Simone y poder salvar la economía familiar.

Por su parte, Nicholas sólo quiere vivir unos días de “relax” en Londres tras el rechazo de la mujer que había elegido como esposa. Y se encuentra con Simone, una mujer que le atrae y con la que es cazado en una posición comprometida y obligado a casarse.


Por los tintes iniciales de la historia, parece que la relación de ellos va a ser un tanto turbulenta. Nicholas cree que le cazó intencionadamente cuando Simone es una mujer que estaba bastante resignada a su destino con casarse con quien fuera como moneda de cambio (algo habitual en aquella época). Y evidentemente, ella salió bien con el cambio, pero él se siente “cazado”. Así que se podría esperar una relación principalmente de rechazo por él. Pero no es el caso, curiosamente. Al final decide que le viene bien tener una esposa y se acabó el problema.

Así que por todo el libro vemos la atracción de los protagonistas. Y el mayor impedimento para consumar el matrimonio es el fantasma omnipresente del hermano.

Poco a poco, se nos va trazando las circunstancias del misterio y que es lo que en última instancia, al final rodea toda la historia. Todo está relacionado, incluso ambas familias, desde hace muchos años y descubriremos parte de la historia de los dos hermanos (Tristan y Nicholas) y los motivos de su separación.

Sinceramente, me pareció que se daban muchas casualidades en torno a esto. Y no quiero describir todas ellas porque destriparía el libro. Pero por eso quizás me pareció un poco inverosímil toda la historia de misterio y lazos interfamiliares. Pero al menos la trama te tiene entretenida.

Aunque hay una parte importante que trata sobre la relación de los protagonistas, lo cierto es que hay una gran parte de infortunios que se van dando alrededor y que evitan que la historia se haga monótona. Y algunos de ellos que afectan a su relación porque Nicholas culpa a Simone por “haberlo distraído”. La verdad es que hay algunas actitudes de Nicholas que dejan bastante que desear. Y aunque no es un personaje malo, tampoco es de esos que llegan dentro y recuerdas.

Simone por su parte, es algo más equilibrada. Al menos, hasta el final del todo, no se la andan cruzando los cables como le pasa a Nicholas.

En cuanto a lo que es el desarrollo de la historia, principalmente la de misterio, tengo que decir que esta autora me parece un poco lenta. A pesar de que no es una autora que se centre especialmente en las descripciones, que es lo que más puede ralentizar un libro, tarda mucho en ir soltando retazos que compongan el rompecabezas, por lo que, a pesar de ser algo muy importante en la trama del libro, te cuesta bastante engancharla.

Personalmente, es un libro entretenido, pero no de los que siempre acabas recordando.