Roman DeWinter nunca había conocido el calor de un hogar... hasta que encontró el camino a la posada de la encantadora Charity Ford. Pero él estaba allí de incógnito en busca de una mente criminal y todas las pruebas la apuntaban a ella. ¿Cómo podría desentrañar toda la trama de falsificación y contrabando y, al mismo tiempo, eliminar a Charity de la lista de sospechosos?

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Roman DeWinter está hastiado de la vida. Su rumbo se ha desdibujado y nada parece llenarle ya. Pero es un hombre de principios y está dispuesto a todo para finalizar el que posiblemente sea su último caso. Su misión: infiltrarse en la posada que regenta Charity Ford, negocio que la agencia para la que trabaja sabe que blanquea dinero y ayuda a esconder a criminales. Pero no han pasado 24 horas desde que la conoce cuando se da cuenta que Charity no encaja en el perfil de una falsificadora. Es demasiado hogareña, demasiado pura, demasiado buena.

Pero no es tonta. Desde el mismo instante en que Charity ve a Roman sabe que es más de lo que aparenta. Una fuerza se esconde tras sus ojos, y también mucho dolor. Charity siempre ha sentido debilidad por la gente “perdida” y no duda en ofrecer un trabajo al Roman en su pensión para que le ayude con las reformas que ha comenzado. Sin embargo lo que siente por Roman va mucho más allá de la amabilidad. Cada vez que la toca nota las chispas que pasan de una mano a otra. Y sabe que Roman puede ser el mayor error de su vida, o la cosa más afortunada que le ha pasado. Sea cual sea el caso, en el fondo sabe que resistirse es una perdida de tiempo.

La relación entre ambos es muy tierna desde el principio, aunque el deseo siempre parece andar al acecho. Pero para Roman, la mayor de sus prioridades es proteger a Charity y limpiar su nombre, aunque sabe que cuando ella sepa que la ha mentido, no querrá volver a saber de él. Y sin embargo le es imposible no enamorarse de la dulce y pura Charity y desear que las cosas hubiesen sido de otra manera.

Una historia llena de dulzura de una gran escritora como es Nora Roberts. Un libro que ninguna de sus incondicionales puede perderse, y que aquellos que no la han leído nunca disfrutarán.