UN CABALLERO PELIGROSO - Julia London
SINOPSIS:Tras provocar la muerte de su primo en un duelo,
Adrian Spence regresa a la mansión de Kealing en
busca de un poco de paz. Sin embargo, el joven
aristócrata ha colmado la paciencia de su padre y, en vez de
consuelo, recibe la noticia de que será desheredado en
beneficio de su hermano menor. El despechado aristócrata se
siente herido e indignado al descubrir la intención de
su hermano de desposar a Lady Lilliana Dashell. Y
Adrian, sin pensarlo dos veces, decide cobrarse su
revancha, presentándose ante la familia de la
muchacha con una oferta de matrimonio que resulta
imposible de rechazar. Consumada la venganza, Lord
Albright se cree victorioso. Pero se equivoca. Lilliana no es
una mujer cualquiera. Y, por primera vez, el orgulloso
caballero sabrá lo que es sentir... un verdadero amor. Tercer libro de la serie "
Granujas de Regent Street".
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CRÍTICA:En primer lugar, tenemos lo que podría denominarse segunda parte de la serie "
Granujas de Regent Street", y hablar de
El Diablo enamorado y
Ángel tentador como las precuelas de ésta serie. Aquí empiezan las historias de los amigos Adrian Spence, Julian Dane y Arthur Christian, que es el lazo de ambas sagas. Quienes recuerden a Arthur Christian se darán cuenta de que es el hermano pequeño de Alex Christian, protagonista de
Ángel tentador.
El prolegómeno de la serie trata de la muerte de uno de los amigos inseparables del grupo, Phillip Rothembow, a quien su disipada vida de libertino le llevó a la muerte en un duelo contra su propio primo y amigo: Adrian Spence, protagonista de este libro.
Adrian Spence, conde de Albright está sumido en la culpa y la desesperación desde que apretó el gatillo que acabó con la vida de Phillip. Tras el entierro de éste, se despide de sus amigos y parte a la propiedad familiar con el fin de aliviar sus penas, pero lo que allí se encuentra es que su padre, que siempre le ha odiado, le ha desheredado. Como hijo mayor no puede quitarle el título, pero las propiedades no vinculadas, así como el dinero, van a parar a manos del petimetre incompetente que es su hermano menor. Adrian ha hecho su propia fortuna con el tiempo y posee el título de conde heredado de su abuelo materno, de modo que sus bienes no salen muy mal parados. Lo único que ahora le ronda a Adrian en la cabeza es la venganza; venganza contra el padre que nunca le ha querido y desheredado para darle todo al inútil de su hermano.
A través del abogado de la familia Adrian se entera de que su hermano Benedict está cortejando a la hija de un barón vecino, y es aquí donde Adrian ve la venganza perfecta: quitarle la novia a su hermano. Movido por el noble propósito de tener un heredero, Adrian se presenta en casa de Lilliana Dashell pidiéndole matrimonio a cambio de pagar las deudas de su familia.
Lilliana Dashell, pese a ser hija de un barón es casi una campesina, una jovencita de campo que nunca ha visto la ciudad, una joven inocente y romántica que ansía ser libre y viajar. Ha estado toda la vida enamorada de Adrian, de modo que, cuando él se presenta en su casa para pedirle matrimonio, no se lo piensa dos veces y acepta.
Y es aquí realmente cuando empieza la historia. Lilliana se ha casado con él por amor, pero Adrian no está enamorado de ella. Por parte de Adrian es un acto de venganza contra su familia; un acto que, nada más producirse, lamenta, porque no desea a esa vulgar muchacha de campo y se culpa de nuevo cuando se da cuenta de que su hermano realmente estaba enamorado de ella.
Como tal, la trama de la novela es sencilla, en algunos puntos encontramos altibajos, y si estás familiarizado con el estilo de Julia London verás que hay muchos cambios de emociones en la pareja, como también discusiones. La primera parte de la novela es donde prima la venganza y el arrepentimiento de Adrian por condenar a Lilliana a casarse con él. Confieso que la segunda parte de la novela ha sido la más interesante, y sobre todo la más hermosa y emotiva, además de la gracia de esconder un secreto familiar que no debería conocerse. Poco a poco se irá viendo cómo prende el amor en la pareja, un amor que también se verá condenado por la desconfianza y cierta persona que meterá cizaña entre los protagonistas.
Después de varias novelas que he leído de Julia London, ésta es una de las que más me ha gustado; me ha mantenido enganchada a la trama desde el principio y ha sido fácil y ligera de leer, y a pesar de tener sus problemas y desavenencias en la pareja, ha sido también una historia muy tierna y romántica, sobre todo por cierta circunstancia que ocurre a mitad de la novela y que creo que todas las que lo lean disfrutarán.
Sin duda la recomiendo, y ya mismo me he quedado con ganas de conocer las historias de los demás amigos. De un 1 al 10 le pongo un 9 al libro.