EL REGALO DEL MERCADER - Julia London
Grace Holcomb, hija de un comerciante enriquecido, es enviada a la escuela de herederas de la señora Harris. Su padre está determinado a subir en la escala social casando a su hija con alguien importante, y para ello que mejor que darle una capa de refinamiento en la mejor escuela. Pronto Grace es cortejada por dos pretendientes, un comerciante y un lord. ¿A quién elegirá ella?
Se trata del tercer relato de la antología "Escuela de señoritas", compuesta por cuatro historias cuyas autoras son Sabrina Jeffries, Liz CarlyIe, Julia London y Renee Bernad. Es una antología inspirada en la serie "Escuela de señoritas" de la propia Sabrina Jeffries. Las cuatro historias se desarrollan lejos de la escuela, pero se relacionan entre si a través de su directora, la señora Harris, que aparece nombrada varias veces e incluso está presente en alguna escena; también a través de la propia escuela, puesto que las protagonistas han sido alumnas en él.
El relato de Julia London es precioso, se desarrolla entre la población de Leeds y Londres, y tiene como protagonistas a dos conocidos de la infancia. Para estar juntos tienen que desafiar a la familia de Grace y las convenciones sociales.
Grace es hija de un nuevo rico que ha hecho fortuna con la lana de oveja y su familia quiere que ella se case con un aristócrata para emparentar con la nobleza. Pero la inocencia y franqueza de Grace no le ayudan a conseguir pretendientes, pero el principal obstáculo está en el hecho de que la aristocracia no está interesada en una joven cuya familia ha hecho fortuna con el comercio. Y Grace no sabe exactamente lo que quiere, si aceptar los deseos de su familia, o escuchar a su corazón, que se acelera cada vez que se encuentra con Barrett, un hombre emprendedor pero sin título. En su deseo de complacer a todo el mundo, algunas veces tiene un comportamiento horrible con Barrett, un comportamiento que él no se merece.
Barrett es el único de los protagonistas de la antología que no pertenece a la nobleza y es un hombre encantador. Es amable, trabajador, ha hecho fortuna con su molino textil, y también es viril y atractivo. Hace tiempo que dejó de ver a Grace como a la niña que jugaba trepando a los árboles con sus hermanos, ahora es una joven atractiva en la que no puede dejar de pensar. Pero él no había pensado en casarse todavía y tampoco encaja en el tipo de pretendiente que el padre de Grace quiere para ella, aún así alberga la esperanza. Cuando ella responde a sus besos y le demuestra interés decide arriesgarse por la mujer que ama. Barrett me ha conquistado desde el momento en que le regala el corderito a Grace, me pareció un detalle muy tierno y él es irresistible.
La historia de amor es muy tierna, Grace y Barrett se gustan, pero debido a los deseos de la familia de ella, ninguno se atreve a dar el primer paso. El comportamiento Grace resulta bastante snob y a veces dan ganas de sacudirla pero está entre dos mundos sin llegar a pertenecer a ninguno de los dos. Su comportamiento con Barrett en algunos momentos la hace insoportable, él es un cielo pero ella se empeña en seguir los dictados de su familia, y Barrett no merece ese trato. Pero él no es un pelele que se deja pisotear y a Grace no le queda más remedio que tomar la decisión de decidir entre el amor y el mundo que su padre desea, y arriesgarse por conseguir lo que quiere antes de que sea demasiado tarde.
Hay varios secundarios importantes pero sin mucha presencia, como el padre de Grace, su otro pretendiente y la pesada señora Wells. Pero destaca la aparición de la mejor amiga de Grace y su marido, los marqueses de Middleton, porque Ava y Jared fueron los protagonistas de "Los peligros de perseguir a un duque" de la misma Julia London.
Es una historia muy tierna con algunos toques de humor y me ha gustado bastante, la única pega que le pongo es el comportamiento de Grace porque Barrett es maravilloso y le hace sufrir rompiéndole el corazón, pero el final es muy romántico. Si el primer regalo simboliza algo especial, el segundo regalo representa el amor que se tienen.
Es cierto que a menudo las antologías no llenan del todo porque las historias son cortas y dejan con ganas de más. Sin embargo, este libro tiene una combinación adecuada de variedad, humor y romanticismo, y es una lectura muy agradable. En conjunto lo he disfrutado mucho.
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