La cantidad de desgracias que sumerge a cada personaje es para mear y no echar gota   .

La protagonista proviene de una familia desestructurada (¿cómo no? el pan nuestro de cada día en la mentalidad americana  ). Su madre fue un put** verbenero   e inmaduro que tuvo a sus dos hijas seguidas, y no les dio ningún tipo de amor o cariño. La protagonista es la hermana pequeña, y su hermana mayor (por sólo un año) tenía Síndrome de down, y aquí empezamos: he dicho tenía, porque la pobre Gracie murió   ... es decir, encima de tener la desgracia de la madre que tuvieron, una de las hijas nació discapacitada, y la autora, va y nos la mata   . La cosa no termina, la madre murió un par de años antes, y creo que no decía por qué   , pero la señora no llegaba a los 60 años. Las únicas muestras de amor y cariño que recibió la protagonista fueron de su mejor amigo Gus  , y la madre de éste. Y no, aquí no terminan las desgracias de la protagonista... por si no fuera poco lo que "tuvo" encima, resulta que su gran secreto es que ella tiene cáncer    , pero vamos a ver ¿Me estás vendiendo una novela romántica, como bonita y conmovedora cuando me estás diciendo que ella se va a morir al final? ¿Cómo cuelas eso?   Porque al ser una novela New Adult no creo que nos meta un milagro de última hora que salve a la protagonista cuando pocas personas jóvenes sobreviven a un cáncer   . Como digo: drama y desgracia gratuito e innecesario.
Otro problema o desgracia. La madre a su vez, tiene una medio hermana mucho más joven (se lleva 7 años con la protagonista, su sobrina), y es bulímica  , a parte de ser un personaje odioso, egoísta, interesada, asquerosa y aprovechada  .

Y ahora vamos con el protagonista, que pese a lo buenorro y encantador que es      , también tiene de lo suyo. Keller es hijo de una exitosa familia de Chicago, con un padre cirujano, y una madre abogada, con todo lo snobs y fríos que fueron unos padres así, Keller creció sin ningún tipo de cariño y con mucha presión en su vida y expectativas, puesto que se esperaba que él fuese como sus padres. Cuando sólo era un adolescente empezó a trabajar para ganarse su propio dinerillo sin depender de su familia, y conoció a una universitaria (5 años mayor que él) de la que se enamoró, fueron novios durante más de un año, y él no había terminado el instituto cuando la dejó embarazada   . Obviamente sus padres dijeron que abortara, pero Keller y su novia no quisieron. Keller ya tenía sus planes de futuro para cuando llegara el bebé, pero como el destino (y no voy a decir la escritora), es tan perro, Lily murió en el parto   ... de verdad ¿era necesario????  en una época que tiene una cantidad de avances médicos ¿Me dices ahora que una joven sana muere de parto?   es que no me lo creo, esto es demasiado rizar el rizo y me ha cabreado muchísimo, tengo un rebote contra el libro, y contra la escritora en particular, que no os imagináis   . Como resultado, Keller con sólo 18 años se convirtió en padre soltero de una niñita preciosa. 
Pero esa vida, Keller la ha dejado en Chicago, ahora está viviendo en otra ciudad, donde se está sacando la carrera y trabaja como pluriempleado para pagarse sus gastos, cada dos semanas viaja a Chicago para ver a su (no voy a decir familia) niña. Puesto que la niña vive con los abuelos y tiene su propia niñera (como la tuvo Keller).

Los amigos de Kate: 
Gus, por suerte no le he visto mucha desgracia a parte de que sea un fumador empedernido, pero me da que su libro (que va a ser el siguiente) va a tener de lo suyo, pues en mi fuero interno sé que Gus siempre ha estado enamorado de Kate.
Clayton, el nuevo amigo universitario: es gay y está continuamente sufriendo acoso y bullying por parte de los otros estudiantes 
Pete, el compañero de cuarto de Clayton, no es gay, y tiene la suerte de ser bastante normal y no conocérsele desgracias. Creo que es el personaje más afortunado del libro, porque se echa novia .
Sugar, la compañera de habitación de Kate, es una zo*** que parece salida de una peli de strippers, también es odiosa.
Shelly y Duncan, ella es su amiga e hija de su jefa, por suerte no se le conocen desgracias, su novio, Duncan, es el mejor amigo de Keller, y era el hermano de Lily, la novia muerta en el parto de Keller 

Ella al final muere del cáncer   . Es lo peor que puede ocurrirle a una lectora de novela romántica, que uno de los personajes muera. Éste libro va de cabeza al listado de los temidos finales infelices   .

Tu dime cómo puede sobrellevar Keller éste trago   , es que no, no y no. Perdió a su novia de juventud cuando dio a luz y le marcó   , y aunque tiene a su niña, ahora ha vuelto a vivir gracias a Kate y ésta también se muere ¿Os parece justo?   La vida real no es justa, pero yo leo para divertirme, y esto no tiene ni gota de divertido, ni me parece bonito .

Por lo visto, a la semana de que muriera su madre (que sí, resulta que se suicidó   -otra desgracia-), en un examen rutinario a la protagonista le detectaron el cáncer con sólo 18 años   , durante los siguientes meses se sometió a todo tipo de pruebas, quimio y radiación incluida y se "curó"... después muere la hermana con síndrome de Down de una neumonía, y a los dos meses de morirse la hermana, que es cuando Kate va a empezar la universidad, el cáncer vuelve, y esta vez más agresivo  . La empieza en los ovarios y pronto se hace metástasis en el hígado y los pulmones, visto lo visto la protagonista pasa de seguir haciéndose pruebas para sufrir y morirse igualmente, y por eso decide vivir el día a día y ser tan alegre y positiva  .

1 Estrella. Lo siento, pero no he conectado para nada con éste libro, me ha parecido hasta tal extremo absurdo, ridículo, inverosímil, cliché y excesivo en cuanto a drama gratuito, que no he podido creérmelo. Más lo siento por las personas que me lo recomendaron, porque sí lo disfrutaron y con buena fe quizás pensaron que a mí podía gustarme. Lo he decidido, con éste tipo de libros en el mercado, me planto en el New Adult. No me gusta, leído un libro, leídos todos, pero como sean hasta éste extremo deprimentes, paso.

La novela empieza cuando Kate, una chica del sur de California se muda a la gélida ciudad de Grant, para empezar la universidad. Allí tendrá que lidiar al principio con la odiosa y aprovechada de su jovencísima tía Maddie, personaje que menos mal que no tiene casi nada de protagonismo, porque lo mismo da que apareciera en la novela que no. Una vez empieza la universidad, conocemos a sus nuevos mejores amigos, Clayton, que es el cliché de amigo gay, Shelly, la hija de su jefa en la floristería donde trabaja a media jornada, y a Keller... el protagonista, y el chico que trabaja en la cafetería. Porque sí, en todos, todos los capítulos de esta novela, está incluido lo mucho que le gusta el café a Kate, y lo que necesita de café al día para funcionar. Repetitivo y cansino hasta la saciedad.

Lo que Kate dejó atrás en California fue su trágico pasado, y digo trágico porque toda su vida se vio inmersa en un tremendo drama gratuito, que incluyen a su madre y su hermana. Pero lo más importante que deja en California es a su mejor amigo Gus. Gus es el chico perfecto y que está buenísimo y con el que toda chica querría estar, a parte de ser súper guapo y una genial persona, toca la guitarra y canta en un grupo de rock alternativo, que oye, sin que nadie los conozca de nada, graban su primer disco en una discográfica de gran renombre y de la noche a la mañana son famosísimos y los conoce todo el mundo y se van de gira. Como supieran mis amigos rockeros de lo que da de sí la imaginación de algunas escritoras, se tirarían de los pelos. Pero lo más increíble de la relación de estos amigos, es que fueran solo amigos y no llegaran a ser pareja ¡Si hasta dormían juntos! Desde que se separan, se llaman absolutamente todos los días, no paran de decirse “tío” o “tía” (en serio, esto es tan cansino y repetitivo como el exceso de café de la protagonista), y siempre al despedirse un “te quiero”. Vuelvo a repetir ¿Cómo estos dos no llegaron a ser novios?

Ahora le llega el turno a la protagonista, Kate. Es tan positiva, tan alegre, tan generosa, tan buena persona, que es tonta de remate. No tiene un duro y está trabajando a media jornada en una floristería, pero cuando la llama la aprovechada de su tía para pedirle 500 dólares para poder pagar el alquiler, se lo da. ¿En serio? ¿Se puede ser más idiota? ¿De donde ha sacado ese dinero si está pobre como una rata? Pero vamos a lo que vamos, es tanto de tanto, y de todo, y la quieren tantísimo sus amigos, conocidos, excepto su compañera de habitación que es una lagarta rencorosa y la odia porque es una envidiosa, que Kate resulta ser un personaje ridículo e inverosímil, resumido: es una Mary Sue. No quiero explayarme mucho más con ella porque no tiene la culpa de que la escritora la creara como una Mary Sue, pero es que a parte de ello, la autora es tan cruel (no voy a decir perra), de darle su propio drama personal, que no familiar, y es el gran secreto que guarda Kate, y que menciona la sinopsis. ¿De verdad? ¿Vendes esto como novela romántica y la gente tiene la desfachatez de decir que es bonito y conmovedor? El dolor y la desesperación no es bonito en ninguna manifestación, quien diga que este libro es bonito y conmovedor es un mentiroso. Cada vez que se mencionaba algo triste o trágico me creaba una sensación de insensibilidad abismal, soy una persona que en seguida me tocan la fibra sensible cuando leo una novela, pero cuando es tan exagerado, desconecto porque no puedo creérmelo, es que en este libro ningún personaje se salva de haber sufrido cualquier tipo de desgracia, es que se tocan todos los palos y todos los problemas habidos y por haber. En una palabra: irracional.

Como si no tuviésemos suficiente con el drama personal de Kate, también tenemos a Keller. El chico guapo con carita de bebé (sí, sí, lo dice Kate), que automáticamente se convierte en el ídolo de Kate porque la provee de café. Keller está buenísimo, es simpático, pero también oculta sus secretos: se dice que no tiene relaciones serias con ninguna mujer y es mejor no enamorarse de él si no quieres acabar con el corazón roto. Pues este chico, que supuestamente tiene un corazón de piedra, se enamora cual flechazo de Kate en cuanto la ve. Sí, Kate está tan llena de alegría, energía, positivismo etc., que Keller no puede resistirse a ello. Al igual que en todo cliché, Keller también guarda sus secretos y su pasado, y es un pasado tan rallado en lo inverosímil, que no puedes creértelo, vamos que no, y no tiene más de veintiuno o veintidós años.

La verdad es que no quiero desvelar nada de lo que pasa u ocurre en el libro, ni cuáles son los secretos de los personajes porque perdería la gracia. Sí, quizás os piquéis si no os lo cuento, pero yo también puedo ser cruel y hacer que lo leáis y lo sufráis como he hecho yo, con tal de que sepáis qué es lo que pasa, y qué os parece.

Ahora vamos con el estilo de la autora; cansino y repetitivo hasta la saciedad. Novela aburrida que no cuenta nada más que el día a día de una chica universitaria: se despierta, va a por su café, va a clase, va a trabajar, cena con sus colegas en la cafetería, sale con sus colegas de fiesta a discotecas gays, y poco más. Todo esto narrado en primera persona; remarco, no me gustan las novelas en primera persona, y las juveniles y New Adult tienen demasiado de esto, pero lo que de verdad me parece un sacrilegio en la narrativa, es el empleo del tiempo presente para contar el libro. No he leído nada más horroroso en mi vida.

La misma se divide en dos partes muy diferenciadas, una primera, monótona y aburrida, donde no ocurre casi nada salvo la alegría de ver a Kate yendo a por su café, a clase, a trabajar e irse de conciertos y discotecas gays. Y la segunda parte, donde mayormente se concentra ése drama gratuito e inverosímil, donde conocemos los secretos de los protagonistas, su vida pasada y la presente, por supuesto, plagada de dolor y desesperación.

¿Y el romance? ¿Qué voy a decir? Pues que podría haber sido bonito en otras circunstancias, insisto, a este libro le sobra drama, y le falta mucho para ser una novela romántica, que yo, como lectora del género, no lo considero. Además, hay veces que no sabes cómo procesar su romance, porque tanto Keller, Kate y Gus parecía un trío. ¿Y el final del libro? Mejor me callo.

Creedme, me apena mucho que este libro no me haya gustado, porque he perdido cuatro días de mi vida para leerlo, y no lo he disfrutado. Leerlo me ha supuesto pasarme cuatro días enfadada y además disgustada porque no me ha despertado ningún tipo de sentimientos salvo malestar. Leo para evadirme, divertirme, para pasar un buen rato, y por supuesto para enamorarme de los personajes y de su historia. Por desgracia, de “Bright side” no he sacado nada de provecho porque no me gusta el drama gratuito y excesivo, habrá gente que sí disfrute de este tipo de historias, pero yo no, así que os digo esto con todo el dolor de mi corazón, y para salvaguardar mi salud mental: no me recomendéis más libros New Adult plagados de drama, clichés y ñoñeces. Mi periplo con Kim Holden ha terminado, y ni siquiera me dan ganas de saber qué fue de Gus.

y más teniendo en cuenta el sistema médico de allí... vamos, que lo que me extraña es que le den tratamiento con lo caro que resulta todo si no tienes un buen seguro médico 

está catalogado de romántico?  porque por el final es más bien narrativa o sentimental, no?