Chicas... ¿jugamos?

Tema: Re: Chicas... ¿jugamos? Miér 3 Jul 2013 - 13:53

Yo si lo he leído. Me parece que ella lo había pillado antes en una situación comprometida con otra mujer. Juntar dedos

Un poco más, Fan. Excitación

Edito: Ya me acuerdo. Excitación

Es Bodas de odio de Bonelli.

Tema: Re: Chicas... ¿jugamos? Jue 4 Jul 2013 - 1:05

pricesa escribió:: Yo si lo he leído. Me parece que ella lo había pillado antes en una situación comprometida con otra mujer. Un poco más, Fan.

Edito: Ya me acuerdo.
Es Bodas de odio de Bonelli.

Ese mismo!!! te toca Pricesa!!! :perfecto:

Tema: Re: Chicas... ¿jugamos? Jue 4 Jul 2013 - 4:50

Bonelli!!! Mi eterna pendiente Joo

Tema: Re: Chicas... ¿jugamos? Jue 4 Jul 2013 - 21:17

Ufff..me he olvidado de que era mi turno. ^^º

Sigo:
-¿Qu-qué está haciendo? -preguntó en un susurro.
-Tocándola -susurró también-. ¿No le gusta?
Emitió un suave ronroneo en su garganta que dio pie a atreverse un poco más, inundando su cuerpo con la magia que había ejercitado con tantas otras, sólo que con ellas había determinado los movimientos, un ritual tan predecible como que el sol salía por la mañana. ¡Ah!, pero no había nada remotamente predecible en XX. Por primera vez en su vida estaba siendo testigo del verdadero despertar de la feminidad, la maravilla de XX descubriendo los placeres de su propio cuerpo. Esto era ingenuidad en el más puro sentido; estaba descubriéndose ante él como cuando una nueva flor se abre bajo el sol de primavera. ¡Oh,Dios!, para compartirlo con ella, y entonces quizá...
Quizás algo de su bondad, de su inocencia, podría permanecer en él. Lo haría sentir, sólo por un
momento, como si estuviera limpio de nuevo.
Cerró los ojos; entonces retiró la mano, e hizo el esfuerzo de apartar la mirada, y observar el cielo
oscuro y escuchar el palpitar de las máquinas. Cuando XX se sacudió a su lado, sus ojos volvieron a ella, a pesar de la resolución. De mala gana, le quitó el pelo del rostro sonrojado y le arregló la ropa. Parecía entorpecida, como alguien que apenas se levanta de dormir. Había visto esa mirada antes, cuando el deseo se transformaba en una fuerza que borraba toda razón de la mente. Pronto estaría de nuevo en su sano juicio y lo odiaría por lo que había hecho, después se odiaría a sí misma por permitirlo. Después de todo estaba enamorada de otro hombre. Sin lugar a dudas estaba imaginando que era PROMETIDO el que la sostenía... y le hacía el amor...
Alejó ese pensamiento de la mente sacudiendo la cabeza, se volvió, y buscó un cigarro en el bolsillo
mientras XX se detenía detrás de él, con ojos grandes y confundidos. Encendió un fósforo.
-Vaya a la cama -le dijo-. Y que no la encuentre afuera de noche otra vez sin XY1 o XY2.
Su boca suave hizo una mueca.
-Podría haberla violado en ese momento, allí mismo sobre la cubierta, ¿y quién diablos se hubiera
enterado? Podría haberle cortado su hermoso cuello y arrojado al agua a las pirañas, y nadie lo habría sabido.
-¿Es por eso que lo hizo? -demandó con voz refrenada aunque furiosa-. ¿Para darme una lección?
¿Para humillarme? ¿Para probar que por ignorar ese mito idiota de que usted es el boto no valgo más que cualquier otra mujer a la que frecuenta? ¿Por qué, señor XY?
-Por todo eso, chere -mintió. Se veía perpleja, entonces le dio una bofetada tan fuerte que el cigarro en su boca cayó al río. Sin agregar otra palabra desapareció en la oscuridad, dejándolo de pie entre las sombras, solo.

Tema: Re: Chicas... ¿jugamos? Jue 4 Jul 2013 - 22:33

me quiere sonar Pensar

Tema: Re: Chicas... ¿jugamos? Jue 4 Jul 2013 - 23:22

Tema: Re: Chicas... ¿jugamos? Jue 4 Jul 2013 - 23:28

Por lo del boto será "Juegos en la sombras" de Sutcliffe?

Tema: Re: Chicas... ¿jugamos? Vie 5 Jul 2013 - 5:10

Tema: Re: Chicas... ¿jugamos? Vie 5 Jul 2013 - 11:37

Mau escribió:: Por lo del boto será "Juegos en la sombras" de Sutcliffe?

Dale Mau.

Tema: Re: Chicas... ¿jugamos? Sáb 6 Jul 2013 - 1:16

Me gustó mucho esa novela, la leí hace un tiempo, sigo:

Londres, abril de 1811.

Su primera visión del perverso y temerario aventurero XY sobresaltó a XX inmensamente, tanto que la dejó sin aliento, porque él estaba inequívocamente desnudo.

Desde luego, ver su cuerpo sin ropa fue algo puramente accidental.

XX, que se alegraba de hallarse por fin en casa para pasar las vacaciones primaverales de su selecto internado, le tendió el sombrero y los guantes al expectante mayordomo y se dirigió hacia la sala de planos, donde su padre supervisaba su vasto imperio naviero. Estaba ansiosa por verle, pues hacía más de un mes desde la última vez que habían estado juntos.

—Creo que encontrará al señor PADRE arriba, señorita XX —salmodió el mayordomo—. Posiblemente en la galería.

—Gracias —repuso ella con una breve sonrisa. Se imaginaba que su padre debía de estar conversando con el retrato de su querida y difunta esposa.

Subió corriendo la amplia y gran escalera y se apresuró a lo largo de la elegante ala este de la mansión. Hacía ocho años, poco antes del inesperado fallecimiento de su madre por una neumonía, PADRE no había reparado en gastos para construir la gran residencia en un distrito recientemente de moda en Londres, exactamente al sur de LUGAR. Pero su habitación preferida era la galería de retratos, donde mantenía viva la memoria de su esposa.

En ese momento, la habitación favorita de XX era el lujoso y novedoso cuarto de baño, situado en el extremo opuesto del pasillo.

Cuando vio salir de la cámara a un sirviente y desaparecer por la esquina, la muchacha suspiró de expectación. Siempre interesado en nuevos inventos, el año anterior su padre había instalado en las cocinas una caldera que enviaba el agua caliente directamente arriba, hasta la gran bañera de cobre, de un diseño excepcional. Pensar en un baño caliente complacía a XX infinitamente, puesto que la selecta Academia NOMBRE para señoritas ofrecía educación superior e instrucción en habilidades sociales para gente refinada, pero nunca tan deliciosas extravagancias como pasarse horas sumergida en un baño caliente y vaporoso.

Al llegar al final del pasillo, la joven vio que la puerta había quedado parcialmente abierta. Pero cuando miró al interior, distraída, se paró en seco.

Un hombre acababa de salir de la bañera ovalada.

Un hombre de impecable musculatura y poderosa constitución.

Un hombre escandalosamente desnudo.

Podía distinguir lateralmente su alta figura, su bronceada espalda, sus tensas nalgas, sus delgadas caderas y sus largas y nervudas piernas, todo ello chorreando agua. De pronto, sin aliento, se quedó fascinada ante la visión de su cuerpo: de fuerte musculatura, vital, hermoso, salvo por las cicatrices que le desfiguraban el torso...

Como si el hombre percibiera su presencia, levantó la cabeza prestando atención y se volvió hacia ella, de modo que le ofreció una visión más completa de sus ingles.

—¡Oh, Dios...! —murmuró XX, asombrada y fascinada al mismo tiempo.

Apartó rápidamente los ojos de aquel territorio masculino prohibido para, impotente, volver a deslizar la mirada por la parte superior del cuerpo. Durante sus casi diecisiete años nunca había visto nada tan imponente como aquel hombre, ni tan magnífico. Tampoco había experimentado jamás una reacción tan puramente femenina y primaria.

Tema: Re: Chicas... ¿jugamos? Sáb 6 Jul 2013 - 6:14

Lo conozco pero mañana creo que no podre pasarme por aquí ^^º

Tema: Re: Chicas... ¿jugamos? Sáb 6 Jul 2013 - 11:04

Yo también lo sé, pero hasta el lunes no puedo pasarme por aquí. Joo

Tema: Re: Chicas... ¿jugamos? Sáb 6 Jul 2013 - 14:06

Se me había escapado un nombre pero ya lo corregí...

Tema: Re: Chicas... ¿jugamos? Dom 7 Jul 2013 - 7:43

Bueno, como nadie lo ha dicho....

Sera "Pecado" de Nicole Jordan?

Creo que si es ese Pensar

Tema: Re: Chicas... ¿jugamos? Dom 7 Jul 2013 - 14:18

Itzy escribió:: Bueno, como nadie lo ha dicho....

Sera "Pecado" de Nicole Jordan?

Creo que si es ese

Te Toca!!! :perfecto:

Tema: Re: Chicas... ¿jugamos? Lun 8 Jul 2013 - 1:48

Va fragmento, es muy fácil Yupy!!

Sintió una deliciosa presión sobre los labios. Firme y suave a un tiempo. Aterciopelada. Seductora. Su boca se movió para explorar la nueva sensación y fue recompensada con un calor húmedo.

«Despierta», dijo una voz suave. Algo tan bueno no podio estar bien.

VIRTUOSA acalló la voz.

Oyó un extraño y breve gemido y la presión abandonó sus labios. Gimió, deseando que regresara y así fue, pero esta vez, sobre su cuello, justo detrás de la oreja. Alzó la barbilla pura darle más espacio a la deliciosa presión. Ésta bajó por su cuello con pequeños mordiscos y lengüetadas, deteniéndose justo antes de llegar a sus pechos anhelantes.

Algo cálido y fuerte le masajeó la parte posterior del cuello, deslizándose por la espalda hasta sus caderas, esquivando las zonas que más ardían por ser tocadas. Estaba en llamas. Se retorció, jadeando.

—Dios, qué linda eres, cielo.

Una voz de hombre.

Abrió de golpe los ojos y éstos se encontraron con otros, cálidos y de color ámbar, con unos cabellos dorados y unos labios que parecían esculpidos... y que en ese momento se disponían a saborear la punta de uno de sus pechos.

Lanzó un alarido y de un empujón apartó un pecho masculino completamente desnudo. Volvió a gritar, apartando las manos como si se hubiera quemado.

—Qué demo...

El hombre se incorporó con el ceño fruncido. VIRTUOSA aprovecho la oportunidad para coger su almohada y lanzarla Inicia él.

—¡Fuera de aquí, pedazo de... de... libertino!

—¿Libertino?

Agachó la cabeza. VIRTUOSA se volvió hacia él otra vez y le golpeó con fuerza en una oreja.

—Eso es lo que dije. Fuera de mi cama. Salga de mi habitación o grito.

—Ya estás gritando, cariño.

—Pues gritaré más fuerte.

Se incorporó, sosteniendo la almohada en alto con ambas manos, lista para derribarle al suelo si no salía de la cama por propia voluntad.

Los ojos de él asumieron una extraña expresión absorta. No la miraba a la cara. La muchacha siguió sus ojos para ver qué los atraía así.

—¡ Aah! —Ella bajó inmediatamente la almohada para cubrirse el pecho.

Fue en ese momento cuando la puerta se abrió de golpe y otra mujer lanzó un grito.

—¡GOLOSOTE!

—Maldición —farfulló el hombre—. Tía ENTROMETIDA ¿Qué demonios haces aquí?

Tema: Re: Chicas... ¿jugamos? Lun 8 Jul 2013 - 10:48

El duque desnudo de MacKenzie. Question

Tema: Re: Chicas... ¿jugamos? Lun 8 Jul 2013 - 14:14

Tema: Re: Chicas... ¿jugamos? Lun 8 Jul 2013 - 14:47

pricesa escribió:: El duque desnudo de MacKenzie.

estoy segura de que es ese!!!

Tema: Re: Chicas... ¿jugamos? Mar 9 Jul 2013 - 3:12

Fantástica escribió:

pricesa escribió:: El duque desnudo de MacKenzie.

estoy segura de que es ese!!!

Pues si! Es ese! Excitación

Te toca Pricesa!!! :perfecto:

Tema: Re: Chicas... ¿jugamos? Mar 9 Jul 2013 - 11:00

Venga, uno fácil. :perfecto:

XY se encogió de hombros y comenzó a comer una manzana.
—Una bonita historia —prosiguió XY1 con precaución—, pero es hora de que le cuentes la verdad a tu señor.
—Lo que ocurre entre un hombre y una mujer en su noche de bodas les concierne a ellos, y sólo a ellos.
—No si la muerte de uno u otro puede provocar problemas en la fortaleza de LUGAR —le rebatió XY1.
—Estamos vivos —replicó XY, cortante.
—Supongo que fue la sangre de tu herida la que manchó las sábanas nupciales.
Silencio.
—XY.
La voz del lobo de los glendruid era ronca, apremiante, como también lo era su postura, inclinado hacia su hermano.
—No es la curiosidad lo que me impulsa a insistir —le aseguró XY1 sin rodeos—. Cada noche, ESPOSAXY1 tiene sueños glendruid y, cada noche, son más aterradores.
La boca de XY dibujó una línea tan fina como la herida de su brazo, y durante un largo lapso de tiempo se limitó a acariciar a GATO, que no podía dejar de ronronear.
—¿Has tomado el cuerpo de XX? —le preguntó su hermano directamente.
Los dedos de XY se detuvieron por un instante y luego reanudaron sus caricias.
—No —se limitó a decir.
XY1 maldijo en sarraceno.
—¿Qué pasó?
—Mi esposa es demasiado fría.
—¿Te rechazó?
Una sombría sonrisa sobrevoló los labios de XY, pero la delicadeza de su mano sobre el gato gris no varió.
—Sí, me rechazó.
—¿Porqué?
—Dijo que prefería morir antes que yacer bajo un hombre.
—Entonces colócala encima -adujo XY1, impaciente.
—Lo he pensado.
XY1 esperó, pero XY no dijo nada más.
—¿Cómo te heriste? —Aunque el tono del lobo de los glendruid era incisivo, no alcanzaba a oírse más allá de ambos hombres.
—Con una daga —respondió XY.
—¿Quién la blandía?
—Mi esposa.
Era lo que XY1 había sospechado, pero, aun así, oír la verdad le dejó paralizado.
—¿De veras intentó matarte? —inquirió.
XY se encogió de hombros.
—Dios —murmuró XY1—. No me extraña que hayas dejado de desearla.
—Ojalá fuera así —masculló XY entre dientes.
—¿Qué?
—Ojalá no la deseara. Pero la verdad es que temo perder el control si vuelve a rechazarme.
Las negras cejas de XY1 se alzaron. Tanto en la batalla como en el dormitorio, el control sobre sí mismo de XY era la envidia de más de un caballero.
—¿Esa es la razón por la que duermes solo?
—Sí. Y ahora lleva puesto ese maldito vestido otra vez—siseó XY entre dientes—. No sabes cuánto deseo poder ver la piel que cubre.
XY1 observó las tensas facciones de su hermano y escogió sus palabras con cuidado antes de hablar.
—¿Crees que prefiere a otro? —aventuró.
—No si desea seguir viviendo.
La mortal frialdad de la voz de XY le indicó a XY1 que incluso él debía andarse con cuidado en aquel
asunto. No había visto a su hermano tan interesado en una mujer desde que persiguiera a OTRA entre las fogatas de los campamentos en Tierra Santa.
De pronto, XY soltó una maldición y parte de la ferocidad que lo inundaba abandonó sus ojos.
—No —negó tranquilo—. XX no ama a ningún hombre; aunque en cierto modo sería más fácil si lo hiciera. Podría matarlo.